A la luz de lo que Steve Ballmer presenta hoy en Barcelona, Microsoft se adelanta en México y afirma que quiere apostar por el desarrollo de aplicaciones hechas en México y para mexicanos.
Arturo Díaz, director de la unidad de negocios móviles para consumo en Microsoft, precisó a Interfase que la tienda de aplicaciones –o Marketplace, como ellos le llaman– se liberará al mismo tiempo que los primeros cuatro modelos con sistema Windows Phone (6.5) en la primera semana de marzo, y contará con un apartado de apps mexicanas.
"Tenemos el objetivo de arrancar con 100 apps muy relevantes localmente. El usuario no necesita 100 aplicaciones de Twitter, por lo que buscamos tener mucha calidad, mucho contenido local para que a ti, el consumidor mexicano que vive en México, te haga sentido", afirmó Díaz.
Para poder cumplir la meta de alcanzar entre 300 y 400 apps hechas en el País para finales de 2010, Díaz aseguró que están generando una serie de programas y talleres gratuitos en universidades y emprendedores para que descubran el potencial de negocios que tiene el desarrollar para Windows Phone.
Piensan en el usuario
Los usuarios de los nuevos equipos con Windows Phone gozarán de una tienda de apps con precios en pesos mexicanos, aunque la compren en otro país y su moneda original sea dólar. Las apps se cobrarán a la tarjeta de crédito que los usuarios den de alta.
"La otra opción que estamos evaluando es que el operador sea el que te facture y el pago de las apps se integre en tu estado de cuenta. Los estudios de mercado dictan que este tipo de pago de servicios es algo que impulsa mucho el consumo", comentó el directivo de Microsoft.
El modelo de tarjetas prepagadas no está considerado a corto plazo, aclaró.
Si no te gusta, no la pagues
Una de las diferencias con otras tiendas de apps, como la del iPhone, es que el usuario una vez que compre una aplicación tiene 24 horas para decidir si no le gusta y borrarla, evitando que se genere el cargo a su tarjeta o en su recibo de teléfono, presumió Díaz.
Algunas de las apps novedosas que saldrán en la apertura de la tienda, comentó, son una de asistencia ciudadana, otra para contar cuentos de niños y una última más 'creativa' que bloquea ciertas funciones del teléfono hasta que el usuario conteste preguntas escolares, para medir su nivel de estudios.
"Sirve como herramienta de reforzamiento del aprendizaje y está basada en los planes de estudio de la SEP", dijo Díaz.
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